Fabián Pacheco, ingeniero agrónomo y activista ecologista, escribió un correo a Adrian Vargas, funcionario de Monsanto Costa Rica, en donde le exige “desistir de su solicitud para introducir maíz transgénico en Costa Rica” y, además, le adjuntó decenas de documentos que demuestran que “esta solicitud es absolutamente rechazada por la sociedad costarricense”.
Pacheco, vocero de Bloque Verde que recientemente organizó una caminata desde Guanacasta hasta San José para oponerse a la liberación de transgénicos en el país, le dijo al funcionario que “utilizaremos todas las herramientas que el Estado social de derecho nos confiere para proteger nuestro patrimonio agrícola nacional”.
Además, el correo fue enviado a centenares de activistas ecologistas, así como funcionarios públicos, diputados, abogados y personas interesadas en la temática de defensa del maíz criollo.
Pacheco explicó a Elpais.cr que el correo obedece a una estrategia de lucha que se ha estado implementando desde hace años en el país y que en estos días se ha intensificado.
“Luchamos por todas las vías posibles. Cuando es necesario nos tiramos a las calles, pero también hacemos el trabajo legal pertinente, el trabajo de construcción de alternativas la difusión en medios. Incluso, si fuera necesario, haremos la oposición en el propio lugar en que se quiera contaminar definitivamente al país con la semilla transgénica”, alertó Fabián Pacheco, ecologista e integrante de la Comisión Técnica Nacional en Bioseguridad que deberá tomar una decisión sobre la solicitud de la empresa Delta and Pine para sembrar maíz transgénico en Costa Rica.
La amenaza que representa para nosotros Monsanto va más allá del ingreso de una de las empresas más codiciosas de todo el mundo, cuya experimentación científica está basada en la generación de bienes y no en el deseo de una sociedad más justa y alineada con el ritmo de la naturaleza. Sus intereses capitalistas irrespetan la autonomía local (Abangares ya se declaró Cantón Libre de Transgénicos), la forma de vida de los pueblos, e inclusive el equilibrio ecológico de eones de años pues los Organismos Genéticamente Modificados no son fruto de la evolución de las plantas sino de los intereses económicos de algunos pocos. Intentan con su dinero nublar la importancia de resguardar el patrimonio génetico de nuestro maiz criollo costarricense. El maíz que cuidaron y mejoraron nuestros ancestros, el grano que es deidad para los mayas (Yum Kaax) y muchas otras sociedades mesoamericanas; el mismo que una vez contaminado genéticamente de los maíces marca de Monsanto, perderíamos irreversiblemente; afectando así nuestra lucha por alcanzar la seguridad alimentaria en tiempos que son clave para las zonas tropicales del mundo, pues nuestra biodiversidad representa una especie de amortiguador para los cambios ambientales que trae consigo la elevación de la temperatura promedio de nuestra tierra. El asunto es más serio de lo que parece, no es antojadizo sino fundamentado ecológicamente por nosotros los que estamos caminando ya hacia una Costa Rica sostenible.
Pero que ahi de los alimentos transgenicos que actualmente ya estan en el pais???!!! que tal de la piña transgenica que ya tenemos o de la soya o el algon ah!?Mientras la sociedad civil, apoyada por el Ministro del Ambiente, hacía un llamado a detener la introducción y expansión de cultivos transgénicos en el país, de manera silenciosa la Gerencia de Biotecnología del Ministerio de Agricultura (MAG) sigue autorizando nuevos sembradíos.Durante el periodo 2003-2004 existían tres compañías: Delta and Pine, Semillas del Trópico y Semillas Olson las cuales sembraron un área de 627 hectáreas de cultivos transgénicos para la producción de semillas. En contraste, para el periodo actual 2004-2005, existen 1.441,8 hectáreas de cultivos transgénicos y han ingresado nuevos actores dedicados este tipo de actividad: Pura Semilla de Algodón S.A. y UNIPO S.A NO SOMOS UN EXPERIMENTO LA GENTE TIENE QUE ABRIR LOS OJOS ESTO NO ES SOLO DEL MAIZ! y a propósito del comentario sobre la existencia de maíz importado en Costa Rica Lo que sigue es exigir a los que fabrican productos de maíz ( tortillas, cereales, etc. ) que certifiquen si sus productos están libres de transgénicos como lo hace Bioland. Si usan transgéncicos, no compren sus productos.
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